El 7 de febrero, un video viralizó un abuso policial en Neiva, donde agentes agredieron a una joven y su acompañante tras evadir un control de movilidad.
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Una situación escalofriante captada en video
El video muestra una escena perturbadora. Karol Lucía Narváez, de 18 años, relata con voz entrecortada cómo fue testigo de la agresión. Según su testimonio, ella y su compañero, al percatarse de la presencia de una patrulla motorizada, decidieron no detenerse en el retén. La joven explica que su compañero estaba asustado y temía que le quitaran la moto, lo que los llevó a evadir el control. «Nos empezaron a gritar groserías y, cuando paramos, de inmediato comenzaron a golpear a mi compañero. Yo solo pedía que no me hicieran nada, pero cuando vi, uno de los policías se vino encima de mí, me golpeó y me arrastró del cabello», relató Narváez.
El video, compartido por varios usuarios de redes sociales, muestra cómo los uniformados actuaron de forma desproporcionada, provocando la indignación de los ciudadanos. Las imágenes generaron una ola de críticas hacia el comportamiento de los policías y evidenciaron un presunto abuso de poder.
Policía confirma investigación disciplinaria
Tras la viralización del video, las autoridades locales tomaron medidas rápidas. El coronel Alexander Castillo Marín, comandante de la Policía Metropolitana de Neiva, fue quien confirmó que los implicados en el incidente fueron separados de sus cargos. En declaraciones a los medios, Castillo Marín señaló que la Seccional de Investigación Criminal e Inteligencia Policial había iniciado un análisis exhaustivo de los hechos. «Se inició un proceso disciplinario para determinar con claridad las circunstancias que enmarcaron los hechos», expresó el comandante.
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El proceso disciplinario tiene como objetivo esclarecer las circunstancias en que se produjo la agresión y determinar si los uniformados actuaron conforme a los protocolos establecidos. Mientras tanto, los agentes han sido retirados de sus funciones y estarán sujetos a la investigación de las autoridades competentes.
Un caso que resalta la necesidad de una mayor supervisión policial
Los ciudadanos de Neiva esperan que este caso se resuelva de manera justa y que los responsables enfrenten las consecuencias de sus actos. El abuso policial no debe ser tolerado, y es esencial que las autoridades actúen con rapidez para restaurar la confianza pública.
Medidas preventivas para evitar futuras agresiones
Las autoridades locales y nacionales deberán implementar políticas y protocolos más estrictos para evitar que casos como este se repitan. La formación continua de los uniformados en el respeto a los derechos humanos y la ética profesional es fundamental para garantizar que el ejercicio de la fuerza no se convierta en un abuso. Además, el uso de cámaras corporales y sistemas de vigilancia en las patrullas podría ser una medida efectiva para monitorear las intervenciones policiales y prevenir futuros incidentes de violencia.
