Las jóvenes, que buscaban oportunidades laborales en México, no han sido vistas desde hace cinco días. Sus familias temen que hayan sido secuestradas.
Seis jóvenes colombianas, entre ellas una pereirana, han desaparecido en Veracruz, México, mientras buscaban oportunidades laborales. Desde hace cinco días, sus familias no han tenido noticias sobre su paradero. Según allegados, las mujeres viajaron para ofrecer servicios en eventos, pero ahora existe un creciente temor de que hayan sido víctimas de secuestro.
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La búsqueda desesperada de las familias
Las mujeres desaparecidas son: Sofía Velásquez Giraldo (21 años, de Pereira), Derlys Dayana Paneso Taborda (25 años, Medellín), Yarlin Giraldo (21 años, Medellín), Marianyeli Michel Chacón Álvarez (Cúcuta), Michel Daniela Morales (21 años, Bogotá) y una mujer aún sin identificar. La última comunicación que tuvieron con sus familias fue irregular y desde entonces no han podido establecer contacto. Esta situación ha llevado a sus seres queridos a denunciar la falta de apoyo de las autoridades colombianas y mexicanas.
Las familias han reportado que, al llegar a México, a las jóvenes les quitaron sus documentos y les exigieron $100,000 USD (420 millones de pesos) para cubrir supuestos costos de viaje. Esta extorsión ha dejado a las familias en un estado de angustia, sin saber si sus hijas están a salvo. La desesperación ha llevado a las familias a realizar llamados públicos en redes sociales, exigiendo la intervención de los gobiernos de Colombia y México para que se inicie una búsqueda activa.
Inacción gubernamental y llamado a la solidaridad
Hasta el momento, los familiares aseguran que no han recibido apoyo significativo de las autoridades en ninguno de los dos países. Esta falta de respuesta ha intensificado el sentimiento de desamparo que viven las familias, que claman por la pronta recuperación de sus hijas. “¡Las necesitamos de vuelta!”, es el grito de desesperación que resuena en sus corazones, mientras el tiempo avanza y la incertidumbre crece.
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La situación de estas jóvenes refleja un problema mayor que enfrenta muchas personas que buscan mejores oportunidades laborales en el extranjero, enfrentándose a riesgos que a menudo no son considerados. Las redes de trata y la explotación son una realidad alarmante que pone en riesgo a quienes buscan mejorar sus condiciones de vida.
