Gustavo Petro y Francia Márquez estarían invitando a la revolución en Colombia, según declaraciones hechas por ellos durante el Día Internacional del Trabajo. El presidente colombiano hizo un llamado al pueblo para que esté en constante movilización para respaldar las reformas sociales que su gobierno llevó al Congreso de la República, y advirtió que en caso de que estas sean coartadas, podría haber una revolución.
Sin embargo, el discurso del presidente Petro ha generado preocupación en algunos sectores, ya que utilizó la frase «pueblo movilizado» en varias oportunidades, haciendo un llamado a una especie de «presión social» para que se cumplan sus objetivos. La vicepresidenta Francia Márquez también hizo un llamado a la movilización durante las movilizaciones del 1 de mayo, en conmemoración de los derechos alcanzados por los trabajadores del país.
La gobernadora del Valle, Clara luz Roldán, ha criticado las declaraciones de la vicepresidenta, pidiéndole que asuma su rol de vicepresidenta, busque el diálogo social, no haga apología de la violencia, no radicalice al país, ni instigue odios. Además, recordó el Palacio de Justicia de Tuluá, que fue incendiado por la primera línea.
Es importante preguntarse qué tan sano es para la estabilidad social del país y la economía que le ha costado tanto recuperarse luego del estallido social del 2021, que de nuevo el pueblo «se movilice». Es necesario buscar un diálogo social para solucionar los problemas del país y evitar una revolución que pueda generar más daño que beneficio.