Reforma tributaria impactaría licoreras regionales y encarecería aguardiente y ron
La reforma tributaria impactaría a las licoreras regionales con un aumento en el IVA que afectaría directamente el precio de bebidas como el aguardiente y el ron. Empresarios advierten que esta medida pondría en riesgo los ingresos departamentales que financian sectores como la salud.
Lea también: Grafitis en viviendas ponen en alerta a la comunidad
El proyecto, impulsado por el Gobierno nacional, busca recaudar $435.800 millones mediante el incremento del impuesto al valor agregado. Sin embargo, representantes de la industria de licores alertan que el golpe económico recaería sobre los consumidores y sobre las finanzas de los departamentos.
Aumento del IVA en aguardiente y ron: un golpe directo al consumidor
Actualmente, una botella de aguardiente paga alrededor de $17.500 en impuestos por unidad de 750 ml. Con la nueva propuesta, el tributo aumentaría a $33.300, casi el doble. Así lo explicó Esteban Ramos Maya, gerente general de la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA), quien aseguró que el cambio elevaría el precio de venta del Aguardiente Antioqueño en más de $20.000 por botella.
El directivo advirtió que la medida no solo afectaría al consumidor final, sino también a la competitividad de las licoreras frente a las bebidas importadas. “El alza del IVA nos deja en desventaja, porque el aguardiente es un producto nacional que compite en precio. Un encarecimiento tan alto puede desplazar el consumo hacia otras opciones del mercado”, afirmó Ramos Maya.
El ron, bebida que también forma parte de la producción regional, enfrentaría el mismo panorama. Las licoreras prevén una caída en las ventas debido al aumento de los precios y al impacto que este tendría en el consumo habitual de los colombianos.
Consecuencias para la salud y los presupuestos departamentales
Las licoreras regionales son una de las principales fuentes de recursos para los presupuestos departamentales, especialmente en lo relacionado con el financiamiento de la salud pública. Gran parte de los impuestos generados por la venta de aguardiente y ron se destinan a cubrir gastos hospitalarios y programas de atención social.
De acuerdo con expertos del sector, una reducción en el consumo, consecuencia de los precios más altos, podría traducirse en menores ingresos para los departamentos. Esta situación pondría en riesgo la sostenibilidad de los sistemas de salud locales, que dependen de manera significativa de estos recursos.
“Cada peso que se recauda en impuestos de las licoreras llega directamente a los hospitales y programas de salud. Si baja la venta, disminuyen los ingresos, y eso lo sentirán las comunidades”, señalaron empresarios consultados.
Además, analistas consideran que un impacto en la producción y ventas de aguardiente podría comprometer empleos directos e indirectos que dependen de esta industria. El efecto en la economía regional sería amplio, pues no solo se trata de impuestos, sino también de dinamismo económico y generación de empleo.
Un debate abierto sobre el alcance de la reforma tributaria
El proyecto de reforma tributaria, que aún debe ser discutido en el Congreso, genera posiciones encontradas. Mientras el Gobierno insiste en que el recaudo adicional fortalecerá las finanzas públicas, las licoreras advierten que el costo social y económico puede ser mayor al beneficio proyectado.
Lea también: Encuentran un adulto mayor muerto en la orilla del río
Para las licoreras regionales, este ajuste no es solo una modificación técnica en el IVA, sino un cambio que puede alterar de fondo el equilibrio del mercado de bebidas alcohólicas en el país. La discusión apenas comienza, pero ya hay sectores empresariales y políticos que piden reconsiderar la medida.
El caso del Aguardiente Antioqueño es apenas un ejemplo de los efectos que tendría la reforma en el bolsillo de los consumidores y en la estabilidad financiera de los departamentos. La decisión final sobre el aumento del IVA en bebidas alcohólicas marcará un precedente en la forma en que se financian los programas sociales con recursos provenientes de las licoreras regionales.