Dosquebradas, a merced del clima: fuerte aguacero desata emergencias en la ciudad

El día terminó en emergencia para los habitantes de Dosquebradas tras un fuerte aguacero que causó deslizamientos y azotó la ciudad desde las 6:00 de la tarde de este viernes. El reporte preliminar de las autoridades locales revela que la situación más crítica ocurrió en el barrio El Balso, donde una familia podría haber quedado atrapada en su hogar debido a la creciente del río Otún.

Lea también: Pereira y su premio a la excelencia en educación y promoción vial

Una noche de angustia y solidaridad

En medio de la oscura y tormentosa noche, los vecinos del barrio El Balso reportaron voces de auxilio provenientes de una de las viviendas más cercanas al río Otún. Al parecer, la rápida creciente del río, alimentado por las lluvias constantes, provocó que el nivel del agua subiera de manera alarmante, atrapando a una familia dentro de su hogar. Equipos de rescate, junto con voluntarios del barrio, se movilizaron de inmediato para prestar ayuda.

«Es desgarrador ver cómo en cuestión de minutos, lo que conocemos como nuestro barrio puede cambiar por completo,» comentó uno de los primeros respondientes en la escena. Aunque la angustia es palpable, la comunidad se ha unido como una sola fuerza para enfrentar esta adversidad.

Respuesta rápida y efectiva ante el desastre

Afortunadamente, los daños no se limitaron solo al barrio El Balso. Otros sectores como Valher, Santa Mónica y La Aurora también sufrieron inundaciones, aunque sin reporte de personas heridas. Además, se registró un pequeño deslizamiento de tierra, pero no causó daños mayores ni víctimas. Los organismos de socorro y la dirección municipal de Gestión del Riesgo, ya activos en el lugar, continúan evaluando la extensión de los daños y coordinando las operaciones de rescate y asistencia.

Lea también: La apuesta del Gobierno del cambio para ampliar la cobertura educativa

La rápida respuesta de los equipos de emergencia y la colaboración comunitaria han sido clave para manejar las consecuencias de este inesperado desastre natural. La ciudad de Dosquebradas muestra, una vez más, su capacidad de resiliencia y solidaridad en momentos críticos.