Adrián Orduño Yáñez, ex subdirector del Hospital de Especialidades de Cardiología Siglo XXI, ha sido apartado de su cargo tras la difusión de un video en el que se le observa llevando a cabo actos sexuales con su secretaria durante una videoconferencia. El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) emitió un comunicado informando sobre la decisión de tomar acciones disciplinarias contra Orduño Yáñez debido a su comportamiento inapropiado durante la reunión virtual.
El video, que se ha viralizado en redes sociales, ha generado más burlas que indignación en la sociedad. En las imágenes, se puede observar a Orduño Yáñez en una situación íntima con una mujer, ambos desnudos, mientras los demás participantes de la videoconferencia, incluyendo mujeres, quedan atónitos.
«Avísenle», dice uno de los presentes en la llamada. Fue necesario que uno de sus compañeros lo llamara por teléfono para informarle que la pantalla de la videoconferencia seguía activa y que todos estaban presenciando la escena. Aún no se conocen las implicaciones que este acto haya tenido en su vida personal y familiar.
En el comunicado oficial, el IMSS señala que este comportamiento constituye una clara violación a los valores establecidos en el Código de Ética de los servidores públicos del Gobierno Federal, al Código de Conducta y de Prevención de Conflictos de Interés, y a las Reglas de Integridad para ejercer la función pública.
El IMSS enfatiza que este acto representa un incumplimiento de las obligaciones laborales del exfuncionario y afecta la imagen institucional. Asimismo, reitera que su personal debe desempeñar sus funciones en concordancia con los principios constitucionales de legalidad, honradez, lealtad y eficiencia.
Varios medios mexicanos han destacado que este reciente escándalo ha servido para recordar que Orduño Yáñez también enfrenta acusaciones relacionadas con una presunta red de corrupción en Yucatán. Estas acusaciones se suman a la gravedad de su comportamiento inapropiado durante la videoconferencia.
Este incidente ha generado un fuerte revuelo en la opinión pública, dejando en evidencia la importancia de mantener conductas éticas y profesionales, incluso en entornos virtuales. Las autoridades competentes deberán tomar medidas adecuadas para garantizar la integridad y el respeto en los espacios laborales.
