Cuatro personas murieron y otras 11 fueron hospitalizadas en Kenia después de participar en un ayuno excesivo en medio de un culto religioso con el objetivo de encontrarse con Jesucristo. Según se informa, Makenzie Nthenge, líder de la Iglesia Internacional de la Buena Nueva, le pidió a sus seguidores que ayunaran de manera extrema para alcanzar una experiencia espiritual.
El hombre habría asegurado que aquellos que murieran de hambre se convertirían en héroes y serían llevados directamente al cielo. Sin embargo, las consecuencias de esta penitencia religiosa resultaron fatales.
Los cuerpos de las cuatro personas fallecidas fueron encontrados cerca de la ciudad de Malindi, en medio de un bosque. Además, se hallaron a otros 11 seguidores en delicado estado de salud.
Según el oficial de investigación criminal Charles Kamau, su equipo recibió una alerta sobre la situación en Shakahola y se dirigió al lugar para rescatar a las personas afectadas. A pesar de sus esfuerzos, cuatro de ellos fallecieron en el camino hacia el hospital, mientras que tres están en estado crítico.
El pastor Makenzie se encuentra detenido y se entregó a las autoridades después del trágico incidente. Hasta ahora, los cuatro fieles que fallecieron no han sido identificados, mientras que los 11 que fueron hospitalizados son siete hombres y cuatro mujeres con edades comprendidas entre los 17 y los 49 años.
Este incidente ha generado gran conmoción en la comunidad religiosa y en la sociedad en general.