Todo fue conmoción en la noche del sábado en el barrio El Triunfo de la ciudad de Pereira, los gritos y la algarabía del perro fue motivo de uno de los peores sustos para los padres de una pequeña de apenas 5 años que se sintieron en pánico, tras escuchar un fuerte grito de ella, el grito, provenía del patio donde estaba el perro.
El fatal ataque se presentó sobre las 8:30 de la noche en la carrera 2 con calle 44 de Pereira, exactamente en este lugar, estaba la pequeña Jordannis Ortiz Zamora junto a sus padres y su hermano mayor, justo en ese momento la niña quiso ir al baño por lo que abrió la reja del patio y simplemente entró, en ese instante el perro de raza pitbull estaba suelto en el patio.
No se sabe qué detonó la alteración del canino y por qué exactamente se originó todo, pero el animal atacó ferozmente a la menor en el muslo de la pierna derecha y luego se ensañó con la cara; los gritos de la pequeña fueron desgarradores, los progenitores de la niña corrieron y a su llegada el perro se había retirado, pero la menor estaba cubierta de sangre en el piso, la mamá fue a cogerla en brazos mientras el papá salió por ayuda, pero el canino atacó de nuevo.
El caos seguía cuando de repente el hombre vio a su esposa peleando con el animal, así que lo tomó por el cuello y lo logró amarrar, posterior a esto lo sacó de la casa y detrás de él, la pequeña de 5 años era llevada por el tío hacia un centro asistencial; en ese momento la cuadra se llenó de miedo y los vecinos corrieron en una moto para llevar a la niña hasta el Hospital de la Unilibre donde fue atendida y posteriormente remitida a la Clínica Rosales ante la gravedad de las heridas.
La menor de 5 años fue gravemente afectada, parte de su cachetico derecho y labio superior quedaron totalmente desgarrados, además de la mordida en el muslo, el domingo fue sometida a una cirugía maxilofacial y se espera otra cirugía plástica para intentar recuperar por completo esa parte de su rostro; la madre de la menor tuvo mordidas en sus brazos, dedos y torso, también deberá pasar por el quirófano, según lo establecieron los médicos que atendieron en caso.
Por su parte los vecinos del sector manifestaron que el perro ya había mordido a varios miembros de la familia en cuatro oportunidades anteriores, pero con laceraciones leves o apenas rayones; el padre de la niña y dueño del canino afirma que han sido oportunidades en las que se ha visto comida de por medio, además de que llevan cuatro años con él de mascota y los hechos han sido recientes.
En cuanto a la legalidad de mantener sin seguridad a estos caninos que reflejan agresividad, según la Secretaría de Salud de Pereira se debe revisar al perro para verificar que no tenga síntomas de rabia, además de observarlo por la siguiente semana, pero es la Inspección de Policía y la Secretaría de Gobierno quienes entran a evaluar si el canino debe ser retirado de la vivienda o incluso sacrificado.
