Su familia no puede creer lo sucedido.

El hombre de 33 años era nacido en Tuluá, Valle del Cauca, pero se había mudado hace muchos años a la capital risaraldense ya que formó parte de la Policía Metropolitana.

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La familia de Julián, un hombre de 33 años que fue encontrado sin vida en Villa Verde todavía no puede creer lo sucedido, los hechos se desencadenaron durante la mañana de ayer martes 7 de marzo cuando su esposa encontró al expolicía en una de las habitaciones de la vivienda sin signos vitales.

Aproximadamente a las 10:00 de la mañana la compañera sentimental de Julián Andés Herrera Meza llegó hasta la carrera 37a con calle 29 del barrio Palmar de Villa Verde, lugar donde vivía con su esposo, pero al ver que el hombre no respondía, comenzó a buscarlo por toda la casa hasta que lo encontró sin vida.

Cuando lo vio sus gritos fueron escuchados por todos sus vecinos, algunos de ellos fueron de inmediato a tratar de auxiliarla porque pensaron que le había pasado algo, jamás se imaginaron lo que en realidad sucedía, cuando se acercaron fue que se enteraron de la tragedia. Tan solo 15 minutos después las unidades de la Policía Metropolitana recibieron la llamada de alerta, todo indicaba que al parecer Julián Andrés habría tomado la terrible decisión de ponerle fin a su vida.

Luego de inspeccionar y verificar la situación, de inmediato los uniformados solicitaron el apoyo del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) quienes fueron los encargados de realizar las entrevistas para hallar la posible causa, además hicieron la inspección al cadáver, posterior a estos procesos, este fue llevado a Medicina Legal, donde fue reclamado el día de hoy por su familia.

El hombre de 33 años era nacido en Tuluá, Valle del Cauca, pero se había mudado hace muchos años a la capital risaraldense ya que formó parte de la Policía Metropolitana, en específico de la Seccional de Investigación Judicial, SIJÍN, donde se desempeñó como investigador de homicidios; seis años atrás se habría retirado de la institución con el fin de montar su propio negocio y había tenido varios emprendimientos a lo largo de la ciudad, actualmente era comerciante de vehículos.

Según lo establecido por las autoridades, una de las hipótesis señalaría que Herrera habría tomado la decisión por problemas sentimentales ya que en el momento se estaba separando de su compañera, con la que tenía dos pequeños hijos; sin embargo se investigan otros posibles motivos.

Se conoció además que el hombre dejó escritas tres cartas para su hija, esposa y padres en la que les decía adiós.

El Pereirano

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