Las declaraciones de una de las gestoras de la toma del Centro Regional de Víctimas señalan que todos vienen sufriendo muchas vulneraciones a los derechos de su población. El retraso de los procesos es uno de los que más está afectando a muchas personas que se agilicen los pagos de indemnizaciones y ayudas.
Catherine Albornoz fue más específica y dijo que hasta hace pocos días había una funcionaria que “ayudaba en todo, pero al parecer a Bogotá no le interesa que las víctimas estén bien y la cambiaron”. Aproximadamente unas 150 víctimas del conflicto armado se tomaron este lunes las instalaciones del Centro Regional para exigir una mejor atención y que el gobierno les de la prioridad que se merecen para no sentirse revictimizados.
Según la líder, que expresó las inconformidades del grupo, actualmente hay otra persona que no sabe el trabajo que se viene realizando y todos los procesos se paralizaron hasta que el trabajador se capacite. “Necesitamos que esa persona que estaba antes regrese porque hay muchas situaciones complicadas de adultos mayores y enfermos que son de urgencia”, agregó.
Albornos agregó que todo indica que los cambios se deben a una situación política. “Hay gente interesada en que nosotros no reclamemos lo que nos corresponde por derecho”, completó la líder que espera junto a sus compañeros de lucha una pronta solución.
