Las autoridades tuvieron bastante trabajo el pasado viernes cuando decenas de adolescentes se citaron en la plaza Ciudad Victoria para al parecer generar una batalla, a pesar de que los jóvenes creen que se las saben todas, las redes sociales jugaron en su contra y el mensaje para volverse a citar con el fin de protagonizar una riña con armas blancas, se les filtró hasta llegar a la vista de la policía, así fue que la institución llegó primero que ellos al encuentro y logró la aprehensión de más de 30 menores de edad.
La cita fue programada para el viernes a las 5:30 de la tarde en la plaza cívica Ciudad Victoria, en la convocatoria que difundieron a través de redes sociales decían “No copiamos de nada, nada de cagaleras, los tombos son unos perros”. Sin embargo, para las autoridades otro fue el cuento y los jóvenes entre los 14 a 17 años que llegaron a la cita, se encontraron con patrullas motorizadas y personal antidisturbios; se asustaron tanto que tuvieron que salir corriendo para refugiarse en los centros comerciales.
Sin embargo, tratar de ocultarse y evitar la justicia no les sirvió de nada pues en total fueron 39 jóvenes aprehendidos que fueron llevados de inmediato a la estación de policía Pereira donde al parecer se les acabó la valentía, pues allí empezaron a llorar y hasta les pedían a los policías que no llamaran a los padres, por temor a una paliza.
Algunos acudientes llegaron hasta el comando confundidos por la información, algunos padres no creían que sus hijos estuvieran involucrados en este problema, otros parientes llegaron en la noche, otros no asistieron a la estación. Pero los que finalmente fueron, se encontraron con funcionarios de Bienestar Familiar y policía de Infancia y Adolescencia, todos los padres fueron interrogados de por qué sus hijos estaban allí y si sabían de los movimientos de los mismos, a muchos padres se les notó la rabia y manifestaron que desconocían lo que estaba pasando con sus hijos.
Lo cierto es que mientras se iban para sus hogares, se le escuchó a varios papás y mamás decir “en la casa arreglamos”. Otros padres preocupados pidieron ayuda al ICBF pues manifestaron que sus hijos se les estaban saliendo de las manos.
De los 39 menores, 3 quedaron bajo la protección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar ya que nunca llegaron los padres de familia. En total se incautaron 9 armas cortopunzantes, no les incautaron estupefacientes, pero definitivamente jamás olvidarán la fecha en la que los padres tuvieron que ir por ellos a la estación de policía.
